jueves, 16 de octubre de 2008

Un hombre en la oscuridad - Paul Auster

Cuando alguien te hace soñar y te provoca tantas sensaciones, la noticia de que publica un nuevo libro la recibes con gran alegría. Antes de leerlo intento no escuchar, ni adentrarme en comentarios o críticas literarias. Quiero partir de mis impresiones.

Lo coloqué en un lugar privilegiado de la estantería. Había que elegir un buen momento para empezarlo. A punto de incluirlo en el equipaje canadiense, y cambiando de opinión casi en el último instante. Me gusta leer en cama, los fines de semana, después del desayuno, o por las noches, en casa, tranquilamente, sin conversaciones o distracciones.

Después de pequeñas decepciones con “Viajes por el Scriptorium” y “La vida interior de Martin Frost”, buscaba un reencuentro placentero.

Desde los primeros párrafos tuve la intuición de que me iba a encantar.

Un hombre incapaz de enfrentarse a su vida, se evade de la realidad inventando historias de un mundo paralelo y analizando escenas de películas.

“ … pero no quiero entrar en eso ahora, no puedo caer en ello, tengo que alejarlo lo más posible de mi pensamiento. La noche aún es joven, y sin moverme de la cama, con los ojos clavados en la oscuridad, en una tiniebla tan impenetrable que no se alcanza a ver el techo, me pongo a recordar la historia que empecé anoche. Eso es lo que hago cuando no logro conciliar el sueño. Me quedo tumbado en la cama y me cuento historias. Quizá no sean gran cosa, pero siempre y cuando no me salga de ellas, me evitan pensar en cosas que prefiero olvidar. La concentración, sin embargo, puede darme problemas, y las más de las veces mis pensamientos acaban derivando de la historia que pretendo contar a las cosas en las cuales no quiero pensar. No hay nada que hacer. Fracaso una y otra vez, hay más chascos que aciertos, pero eso no quiere decir que no ponga todo mi empeño.”

He sentido pena al llegar al final, me hubiera gustado seguir. Me conmueve la conversación con la nieta sobre su pasado, sus decisiones y equivocaciones. Es, sobre todo, una historia llena de: soledad, sufrimiento, intento de olvidar o no pensar, incapacidad de seguir adelante, culpabilidad, comunicación y constante necesidad de expresar sentimientos, poder hablar con las personas a las que queremos, atenuar el malestar y cerrar las heridas.

Me gustaría sentarme en ese sofá, a su lado, ver y comentar esas secuencias... (Hace referencia a varias películas que volveré a ver, en su honor).

10 comentarios:

Miguel dijo...

Aunque un poco invadido por las últimas lecturas de Auster, que me invitaban a alejarme un tiempo de sus novelas, el argumento de esta me seduce. Probaré suerte.
Gracias po ayudarme a la decisión.
Un beso

Penélope dijo...

Todavía me queda un rato de Brooklyn Follies, que también me la recomendaron; cuando acabe (que me está gustando mucho, ya lo sabes) igual me atrevo con esta (yo todavía no tengo empacho de Paul Auster).

eva dijo...

no he leído nada de Paul Auster, lo pondré en mi lista de libros, esa sensación que te dejó el libro me ha pasado a mi con algunos, y me encanta. Biquiños

Pepe del Montgó dijo...

He leido mucho enesta vida y pensaba que al jubilarme volvería a retomar la lectura. Pero me pasa como con la acuarela lo estoy dejando para otro momento. De todas formas va como recomendado

LU dijo...

Imaging, puede que necesites un respiro. Yo prefiero variar, leer cosas muy diferentes, para no saturarme y, sobre todo porque me aporta mucho más.
¿Cuál es tu favorito de Auster? ¿Y el que no te ha calado?
Buen fin de semana
Biquiños

LU dijo...

Penélope, te digo lo mismo, cuidado con los empachos. Haz un paréntesis, si quieres, y después, a por él.
Te dejo en el correo un regalito: el
cuento de navidad de Auggie Wren, que es una verdadera delicia.
Biquiños

LU dijo...

Eva, es uno de mis escritores favoritos. Espero que te guste.
Biquiños y buen fin de semana.

LU dijo...

Pepe, hace una semana vino a tomarse un café con nosotros una compañera que acaba de jubilarse y dice que habría programado hacer muchas cosas, pero que, de momento se deja llevar y disfruta de esa nueva etapa de libertad, sin estrés, ni imposiciones.
Pues eso, a disfrutar, que la lectura o la acuarela están ahí para cuando te apetezca.
Buen fin de semana
Biquiños

X dijo...

Pues me apena decirlo, pero esta última de Paul Austerno me ha entusiasmado como otras. Pensaba que se iba a volver a lo más Auster, pero me he encontrado con algo más kafkiano, no sé... me esperaba otra cosa.

Tras 10 días en la cama , empiezo a ponerme al día... Necesito unas vitaminas ya.

LU dijo...

Xabipop, me alegro de verte de nuevo por aquí. Eso implica, al menos, una mejoría. Pues nada a por esa carga de vitaminas y en breve a pleno rendimiento.

Sí que he leído mucha crítica negativa de este libro. Después de escribir esta entrada vi también una entrevista en La2. Sí que da pena la decepción de alguien que nos gusta, pero, ya sabes, lo de las preferencias es muy relativo.

Viquiños